sábado, 25 de octubre de 2008

Los Vinos en el siglo XVIII comida Marques de Sade


 El consumo de ciertos  vinos en esa época, desempeño un papel de afirmación en la pertenencia de ciertas clases sociales, y esos vinos escogidos no faltaban en las casas de altas elites en el siglo XVIII, mientras que el resto de la población bebía vinos de mala calidad que se obtenían masivamente en las afueras de París o inclusive vino flojo, o sea vino con agua, aguapié o sidra.

 

Para alrededor del 1750 que es aproximado a la fecha de nuestro relato, los vinos famosos eran:

 

Los vinos de borgoña, vinos de Chambertin, Montrachet blanc, Clos-Vougeot y Nuits-Saint-Georges y llamy pilot.

 

Los vinos mas famosos en general eran:

 

Caten vinos de la Romanée, de saint-vivant, de Cîteaux, de Chambertin, de saint-George, de Grave, tanto tinto como blanco; huelan el vino de Rotat, de Chypre, de Pacaret, de Samos, de Malvoisie, de Madère, de Malaga, de Malaga-muscat, de Syracuse. Sean graciosos por la botella d', de rozé, y recalden el Tokai, si lo encuentran; porque es a mi juicio el primer vino del mundo y beberlo les corresponde sólo a los señores del mundo.

Aunque no es completa, su lista permite esbozar una geografía de los vinos finos que se apreciaban en reino. Los principales vinos franceses que gozaban de buena fama eran los mejores productos de los viñedos de Borgoña, de Champaña, de Burdeos, de Ródano y algunos generosos.

Imaginense, los canapés Poutarge, con un vino blanco seco como un saint George de Grave o  un vino suave de la borgona,

El faisan a la Brillant –Savarin, al punto, tenia un sabor a bosque, por lo que un vino con con envejecido en barrica y con el aroma a madera harian una buena combinación.

  Las botellas de vino se mantenían frescos en cubos de porcelana y las copas de cristal cortado esperaban en vaseras.

Los vinos escogidos se degustaban en varios tipos de copas. El champán se bebía en flûtes (copas esbeltas y altas) o en copas más anchas de boca, como las que ven en Le déjeuner d'huîtres, un lienzo de Jean-François de Troy pintado en 1735. El buen gusto se expresaba por la calidad del cristal empleado: en la casa de Tardy, propiedad del señor de Saint-Etienne, el borgoña se servía en copas de cristal fino, mientras que el obispo de Saint-Papoul, bebedor de burdeos como de moscatel, poseía copas sopladas en Lorena

 





1 comentario:

CANTACLARO dijo...

Veo que estás buscando mucho sobre el entorno de la mesa de muchos de algunas épocas.

No sé si conoces a Alexandre Balthazar Laurent Grimod de La Reynière, uno de los primeros que empezó a escribir como "periodista" sobre el arte del buen comer. Busca de él, "Guía de Golosos y Manual de Anfitriones".

Saludos.